Londres, 6 sep (Prensa Latina) El primer ministro Boris Johnson se despidió hoy de los británicos antes de viajar a Escocia para formalizar su renuncia ante la reina Isabel II, y entregar la jefatura del Gobierno conservador a Liz Truss.
Esto es todo, amigos, declaró Johnson frente a la puerta de la residencia oficial de los gobernantes británicos en el número 10 de Downing Street.
En un breve discurso antes de tomar un vuelo ejecutivo hacia la residencia de verano de la monarca en Balmoral, el controvertido primer ministro saliente ensalzó lo que consideró logros de su mandato: la salida del Reino Unido de la Unión Europea, la campaña de vacunación y el apoyo de Londres a Ucrania tras la operación militar rusa.
También prometió apoyar en todo momento a Truss, quien la víspera fue proclamada ganadora de las elecciones internas celebradas por el Partido Conservador para escoger a su reemplazo, y exhortó a sus correligionarios a imitarlo.
En alusión a su futuro, se comparó con un cohete propulsor que después de cumplir su función, «vuelve a entrar suavemente en la atmósfera para sumergirse invisiblemente en algún rincón remoto y oscuro del Pacífico».
Sin embargo, su alusión posterior al patricio romano Cincinato, a quien los senadores le pidieron que volviera de su retiro para volver a ser dictador, hizo pensar a muchos que todavía tiene esperanzas de regresar al número 10 de Downing Street.
Johnson fue obligado a renunciar por sus propios ministros el 7 de julio pasado, tras una serie de escándalos que pusieron en entredicho su liderazgo, pero siguió al frente del Gobierno hasta el nombramiento de un sustituto.
Truss, quien se desempeñaba como canciller y derrotó en la contienda interna al exministro de Hacienda Rishi Sunak, también viajó este martes a Balmoral para recibir la autorización de la monarca para formar un nuevo gabinete.
Luego de la audiencia real, la flamante primera ministra, tercera mujer en ocupar ese cargo después de Margaret Thatcher (1979-1990) y Theresa May (2016-2019), regresará a Londres para instalarse en la residencia oficial y pronunciar su primer discurso a la nación.
La víspera, tras anunciarse su victoria, Truss afirmó que cumplirá sus promesas de campaña de recortar los impuestos para aliviar el costo de la vida, y actuará contra alza de la tarifa energética, aunque sin dar detalles sobre su plan de gobierno.
Un sondeo rápido realizado por la encuestadora YouGov pocas horas después de ser nombrada como sustituta de Johnson, el 50 por ciento de los encuestados dijo sentirse decepcionado con su elección, contra un 22 por ciento que se declaró satisfecho.
El 67 por ciento también dijo tener poca o ninguna confianza en que la flamante jefa de Gobierno pueda resolver la crisis del costo de la vida.